En estas fechas, una gran parte de la población española se halla inmersa en plena «Operación Bikini». El verano, el buen tiempo, la playa y la piscina se encuentran a la vuelta de la esquina y todo el mundo quiere verse mejor con las prendas estivales. Pero, ¿sabéis que el aceite de oliva puede ser un buen aliado en estos momentos? ¡Tomad nota! Aquí os dejamos algunos útiles consejos científicamente razonados.
Desde hace años, varios grupos de investigación han investigado las propiedades de la oleiletanolamida (OEA), una sustancia derivada del ácido oleico y metabolizada en el intestino delgado, que activa los mecanismos cerebrales que regulan el apetito y la sensación de saciedad, según afirman desde el CIBERobn (Centro de Investigación Biomédica en Red-Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición). La OEA se encarga de enviar mensajes al cerebro que reprimen el hambre y prolonga, por tanto, el tiempo entre comidas, algo muy beneficioso cuando se siguen dietas de adelgazamiento, ya que evita el temible efecto de «picar» entre horas.Un estudio realizado por BreakfastWeek señala que el hábito de picar entre horas puede aportar unas 250 calorías más a las recomendadas cada día porque, en la mayoría de ocasiones, no se trata de tentempiés saludables sino alimentos como chocolatinas o patatas fritas.
Pero los efectos de la oleiletanolamida no se quedan en sus efecto saciante. Los investigadores del CIBERobn han demostrado que esta sustancia es capaz de intensificar la acción de termogénesis de los agonistas Beta-3 adrenérgicos, permitiendo convertir el tejido adiposo blanco en pardo. Un hallazgo que abre las puertas al diseño de terapias anti-obesidad más efectivas.
Los doctores Juan Suárez y Fernando Rodríguez de Fonseca, del Hospital Regional Universitario de Málaga, han sido los coordinadores de este estudio, en colaboración con los doctores Carlos Diéguez y Rubén Nogueiras, del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela (CHUS). La investigación permitió demostrar que los agonistas Beta-3 adrenérgicos (encargados de activar la termogénesis) y la oleiletanolamida potencian la reducción de la ingesta de alimentos y la ganancia de peso corporal mediante un mayor gasto energético. Estos efectos se asocian con una disminución de la masa grasa y la reducción de los niveles de triglicéridos y colesterol en sangre.
Así pues, ahora que llega el buen tiempo, apostemos por recetas ligeras y saludables, como ensaladas y sopas frías(gazpacho y salmorejo, por ejemplo), acompañándolas siempre de aceite de oliva para hacerlas aún más sanas. Al tiempo que protegemos nuestro corazón… ¡tendremos una ayuda extra para lucir cuerpazo este verano!