Las demandas de los consumidores en cuanto a alimentos y bebidas van cambiando año tras año. ¿Moda? ¿Evolución? Los motivos son diversos, pero provocan que las tendencias cambien y que la industria alimentaria tenga que adaptarse a ellas. El Centro Tecnológico AINIA ha estudiado estas tendencias para ofrecer las claves que nos harán entender lo que buscan los consumidores en el nuevo año. ¡Apunta estas tendencias en alimentación que van a triunfar en 2018!
1. Bienestar y dietas personalizadas.
El ritmo de vida acelerado que marca la rutina de muchas personas hoy día lanza a los consumidores a que en alimentación busquen justo lo contrario: productos saludables, bajos en grasas y azúcares, que ayuden a reducir la fatiga, a combatir el estrés y, en definitiva, que les aporten la energía necesaria para continuar con su día a día.
Y, al mismo tiempo, quieren huir de la masificación que vive la sociedad y demandan productos personalizados a sus gustos e intereses. Por eso, la industria alimentaria se centra en conocer el comportamiento de los mismos, sus preferencias y tradiciones, con el fin de lanzar al mercado gamas de productos que cubran un amplio espectro de preferencias.
2. Lo visual y la textura como valor diferencial.
Vivimos en la era de la imagen. El auge de las redes sociales, donde compartimos fotografías de lo que comemos en cada momento, ha provocado que los consumidores busquen un punto más en los alimentos que consumen. Ya no basta con que sean saludables o tengan buen sabor, sino que, además, deben entrar por la vista. Como dice AINIA, “el consumidor busca una experiencia sensorial”. Colores que llamen la atención, texturas nuevas y originales, un cuidado aspecto final… todo lo necesario para que la foto de lo que comemos salga bien en Instagram.
3. Fórmulas para ahorrar tiempo y dinero.
Ya lo hemos dicho: vivimos deprisa. Y esa falta de tiempo es la que nos hace buscar fórmulas que nos permitan ahorrar tiempo y, ¿por qué no?, dinero. El auge del comercio electrónico es un buen ejemplo. Compramos por Internet cada vez con mayor frecuencia porque nos ahorra la visita al supermercado, por lo que las empresas cada vez apuestan más por disponer de una tienda online.
Pero, además, estas nuevas tecnologías permiten conocer los gustos del consumidor en base a su navegación por la tienda online y a sus compras, lo que permite, a su vez, ofrecer experiencias personalizadas en función de esos comportamientos.
4. Productos seguros, éticos, naturales y sostenibles.
La mayor conciencia ecológica de los consumidores provoca que demanden productos éticos y sostenibles. Eso significa que leen las etiquetas para identificar los ingredientes o el sistema de producción, que se fijan en que el packaging sea responsable con el medio ambiente; y que quieren productos lo más naturales posible.
Además, las crisis alimentarias que se han vivido a lo largo de los años también tienen una consecuencia: exigen que los alimentos sean lo más seguros posibles.
5. Nuevas tecnologías en la producción de alimentos.
La tecnología irrumpirá con fuerza en 2018 en los procesos de producción de alimentos. La impresión 3D, que ya ha llegado a algunos segmentos de la restauración, lo hará también a la industria alimentaria. Y también cualquier otra técnica que ayude a lanzar productos innovadores desde los laboratorios de I+D de las industrias. Eso sí, el resultado final debe ser un producto lo más natural posible, que respete los principios de sabor, apariencia y textura.
Habrá que estar atentos a lo largo del año para ver cómo evolucionan estas tendencias y si se confirman o aparecen otras nuevas.
